miércoles, 23 de junio de 2010

Horario


Una de las peculiaridades de nuestro país es el horario laboral que,por extensión, se ha ido explayando sobre toda la sociedad dejando,unicamente,algunas islas un tanto especiales,pero significativas que,si bien entrarían dentro de la lógica que preconizamos son,por contra,las que distorsionan a todo el sistema en funcionamiento.
A ver. Tenemos que la función pública,bueno una parte,tiene un horario europeo;por ejemplo los Ministerios y algunos entes administrativos; otros por su peculiaridad y servicio,logicamento no pueden acceder a él. Por contra todo el aparato productivo funciona con un horario partido que destroza cualquier conciliación familiar y hecha por tierra la productividad nacional. Algunas actividades,debido a la presión ejercida por sus trabajadores,me refiero a la banca,también disfrutan de esta jornada que,paradojas de la vida,va en contra de la actividad comercial de la cual suelen vivir; entre otras claro.
Pero este hecho español no fue siempre así; hace menos de cien años,es decir casi ayer,teníamos en este país unos horarios iguales que Francia o Italia,es decir,europeos.
Esto es como el ancho de via,característica española, de nuestros ferrocarriles, que tantos inconvenientes nos ha causado y que un buen sinfin de gastos ha originado; sin embargo seguimos en las mismas. Erre que erre permanecemos anclados a nuestros pretéritos como si tuviesemos miedos atávicos que no sabemos espantar;ni siquiera plantear.
Y luego decimos que sabemos torear.

1 comentario:

Jorge Tamames dijo...

Interesante. Yo he pasado de levantarme cada día a las 6 cuando estaba en Calcuta, a quedarme dormido hasta las 9. A nada que quedo a cenar con amigos vuelvo a casa a la una o a las dos. Me resulta un poco frustrante. Existe un desbarajuste en el horario laboral, y otro igual o mayor en el social...

Saludos.