jueves, 27 de enero de 2011

Robin Hood.

Una Pica en Navarra deben de estar pensando cientos de miles de personas que han visto como el banco se llevaba su casa mediante subasta. Este último año la cifra sobrepasó las 100.000 viviendas y,mientras tanto,la estupidez visionaria de los agentes políticos miraban para otro lado.Entre estos juega un papel destacado el Ministro de Fomento que en unas declaraciones mas propias de usurero desprecio cualquier alusión a un cambio juríco con relación a la ley hipotecaria.   Una Ley que según el auto conocido hace dos dias coloca a los bancos en una tesitura bastante delicada al menos frente a la presión de la opinión pública.  Es lógico pensar que algo está cambiando; hace unos meses ya se produjo en Granada una sentencia que cuestionaba el suelo de las hipotecas;ahora le toca el turno a la dación .  Esto es,entregar las llaves del piso si no lo puedes pagar y dar por finiquitado el préstamo concedido.  Es claro que esto puede dar lugar a la picaresca;`pero para eso nuestra banca  está dotada de los suficientes y bien acreditadas mentes pensantes para estudiar todas las posibilidades y atajar los problemas para que esto no ocurra.  Lo que no es de recibo es que el usuario compre una casa por 100 pague 20 y al cabo de cierto tiempo le embarguen la casa,le pagan 30 y le reclamen  120.   Y esta realidad que acontece cada dia es vista por políticos y financieros como normal y lógica.  Claro es que si hubiese acaecido una masacre protagonizada por un padre de familia en tales circunstancias los políticos presionados por la sociedad cambiarían de parecer.  Mientras,siguen apostando por dar mas y mas privilegios a la banca,por someterse a sus dictados y por acatar sus normas. 
   Todo esto que digo se vé en el auto dictado por la Audiencia de Navarra. Claro es que la motivación expuesta por los Magistrados carece de toda base legal,incluso hace sonrrojar a mas de un letrado,pero no es menos cierto que es un toque de atención a unas practicas onerosas,y casi mafiosas,por parte de una privilegiada banca.   Utilizan practicas coercitivas sin pudor alguno,violan no solo el espíritu de la ley,sino incluso la letra de la misma y,para mayor descaro,no tienen reparo alguno de sentarse delante del cliente y decirle que "todavía" le hacen un favor.   Lo dicho,cualquier dia resurge un Robin Hood español.

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